Jung Woo Sung y Yoon Eun Hye para Cartier

Nuestro Jung Woo Sung codeándose en Nueva York con la mismísima Carlota. Si ya saben la nueva cara de Gucci, la que sale con ese actos tan atractivo y tan famoso y tan francés que le saca 15 años y tiene un hijo de 11.... como diría mi abuela... si es que la cabra tira al monte....

Fuente: Soompi

Rain para Esquire, Being a Man

Solo es cuestión de tiempo que tengamos unos escaneados decentes de esta revista. O no conozco el grado de fanatismo de las clouds del mundo. Ya quisieran políticos de cualquier partido su grado de entrega.

Nota: los relojes se ven bien no? que en cada foto lleva una no sé si habran fijado...

Fuente: Six To Five 1982

A Rain Cartier le desluce

Le veo fatal. No sé que le falla hoy. Será el pelo. El trahe no puede ser porque le queda como un guante, ese triángulo que deja adivinar la camisa blanca justo por encima de la cintura, ni a medida. La manga un poco corta para mi gusto. Y los zapatos y la corbata, todo bien. Y el contexto, perfecto. Cartier. Con un pez gordo de la casa explicándote como se tallan los diamantes y como se engarzan sobre los metales preciosos y como se aseguran para evitar robos, despistes y divorcios traumáticos. Va a ser el pelo.



Fuente: Soompi

Un Cartier en cada esquina

Como si Hong Kong necesitara otra tienda donde comprar Cartiers. Será que hay mercado. Nueva tienda con inaguración por todo lo alto, que luego dicen que hay crisis, pero se ve que el mercado del diamante ni sufre ni padece, las estrellas de relumbrón habituales y mucho rojo y dorado, y espectáculo, y modelo luciendo joyas valoradas de miles de miles de euros y una cena muy vip, y vamos que no puedo ni imaginar en el pico que se te pone un acto de comunicación de este tipo.

Nuestro Tony fiel a su estilo de una de cal y una de arena, se planta ese cinto que no nos deja mirar hacia otro lado que no sea su cintura.


Fuente: Tony Leung Info, Zimbio, Luxuo

Tony Leung tiene más zapatos

Y muy elegantes además. Cuando se pone a trabajar aunque sea dentro de su apretada agenda de compromisos publicitarios, se transforma, parece otra persona. Debe ser el pelo, la ropa, la cara de profesionalidad, o la iluminación, pero se le echan un montón de años encima. Igual es por culpa de ese horrible cinto que no me deja pensar con claridad, pero quedo antes con el Tony de sport que con el de la pajarita y el reloj. Aunque no creo que sea culpa del reloj. Que un reloj así no pone años. No, no, por el reloj no es.





Y qué otro habitual ha pasado ya por este acto de declaración de amor a un modelo de reloj?....



Quién si no él?



Fuente: Tony Leung Info